Orquideas

Debo reconocer que me perdí un poco y quedé aislado al lado del camino. ¡Como me encanta esa canción! Se las recomiendo, es de Fito Paez y cuando era más joven, la cantaba junto con otro amigo a todo pulmón. Eran noches donde nos reuníamos a tomar y hablar mierda.

Nos poníamos a chistar, a echar rulo y hablar sin parar. En algún momento de la noche, él sacaba su guitarra y comenzaba a tocar mientras trataba de llevar el ritmo de la canción que estuviese sonando. De momento podríamos estar escuchando El Aventurero, ó el clásico de clásicos, Desperado. Sin embargo, en algún momento de la noche, llegábamos a un punto donde los recuerdos de nuestra niñez, nos invadían con regocijo y era el momento de escuchar al buen Fito.

Que buenos tiempos, ahora me encuentro tan lejos de todo que hasta creo que vivo en una realidad alterna y solo veo como pasan los días mientras espero a que llegue el día en que deje este plano. No lo digo por sonar trágico, lo digo porque así me siento.

Tal vez esta pandemia ha llevado a que esto sea más duro, pero creo que desde que tengo memoria, nunca he cuadrado. Por ratos, me gustaría tener las mismas ambiciones que otros, aveces me siento y creo estar llevando a cabo dichas metas, pero al final vuelvo al mismo punto de partida en donde pienso que simplemente estoy viviendo tal cual me enseñaron y no como yo quisiera. No, no me estoy quejando de mi vida, de hecho llevo una vida maravillosa y me siento bastante afortunado. Tal vez solo pienso en historias que me gustaría vivir o saber que existen y no han sido encontradas.

Que tan increíble sería que el viaje al centro de la tierra no sólo fuera magnifica obra literaria de Julio Verne, sino un lugar que es real. ¡No saben lo que daría por algo así! Tal vez viva lo que me quede de vida en un sitio desconocido, pero descubriendo tanto. Por ejemplo, muchas veces pienso que si tuviera la oportunidad de ir al espacio, no lo pensaría ni un segundo y, será muy Hollywood lo que diré pero, si hubiera una misión para meterme en agujero negro, estaría de primeras.

Soy un ser humano demasiado curioso. Creo que lo que más me motiva de vivir es saber que en cualquier momento del día aprenderé algo nuevo. No importa qué, siempre es algo nuevo y me llena de felicidad.

El día que no aprendo algo nuevo, siento que aún no he despertado, que sigo esperando.